jueves, 23 de abril de 2009

mosquito duro

Con los dientes me exploto una ampolla que tengo en el dedo índice. Me soplo. Arde, la muerdo. Absorbo el líquido que chorrea. Es dulce. Lo trago.
Ayer me quemé con el horno haciendo tres docenas de empanadas, meta poner y sacar, relleno, repulgue, relleno, repulgue, me quemé. Ahora me arde, me froto el dedo con el pelo.
Abro el frezzer con la otra mano y saco el mosquito duro, congelado de una de las cubeteras.
A principio de este año mi abuela me lo regalo. Es el Walt Disney de los insectos –me dijo.
Ya me sacó una verruga y me curó una uña encarnada.

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