lunes, 25 de enero de 2010

catársis

-Hagamos lo que no hay que hacer-
Hace poco leí o escuche que alguien inventó o se le ocurrió
una página web como filtro de esos mails que uno escribe
en momentos de calentura. mails que uno manda
borracho o ansioso
o what ever pero que no pasan
por ningún proceso de censura interna.
Apretas send, y chau no hay vuelta atrás.

Durante todo el 2009 (en el hospi donde trabajo)
se habló de la clínica de las impulsividades,
y en lo necesario de construir un espacio para la pausa,
para que algo se instale, algo de otro orden
para evitar el ¨pasaje al acto¨ fuera
del encuadre psicoanalítico.
Todo tiene que ver con lo mismo, creo.

Hace poco escuché un cassette
con una grabación de una mina
tirándole las cartas del Tarot
a mi vieja, y no me acuerdo de nada.

No subestimes mi miedo.

Pienso en mi definición de Arte poética,
en los años pares (malditos) y los años impares
en mi positivismo, en la ultra reflexión, los cuestionamientos
y en dejar de robar cigarrillos. Las fotos
me inspiran, los artistas jóvenes
rebeldes desprejuiciados, los aerosoles.

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